En el Colegio Comfacauca Puerto Tejada, las matemáticas dejaron de ser fórmulas abstractas para convertirse en una experiencia viva, desafiante y significativa, gracias a las Olimpiadas Matemáticas 2025, una jornada que abrió una nueva puerta al conocimiento.
En esta versión, se dejó de lado lo tradicional y se optó por un recorrido con estaciones. En el Casino matemático, el azar y la probabilidad se aliaron con la lógica; en el Museo matemático, la música, el arte y la geometría contaron historias y en la estación tecnológica el Minecraft, demostró cómo se desarrolla el pensamiento lógico por medio de la creación de mundos digitales.
Este año, también se resaltó el legado afrocolombiano en el desarrollo del pensamiento lógico. «Aquí educamos desde lo que somos, desde nuestra diversidad y desde la fuerza de nuestra historia», comentó Julio Hurtado, coordinador académico, sobre la importancia de honrar los saberes ancestrales.
“La verdad es que aquí creemos que aprender también puede ser una aventura, una que despierta la curiosidad, fortalece la identidad y abre puertas al futuro”, resaltó la rectora de la institución, Karen Huertas, quien enfatizó que en las Olimpiadas Matemáticas 2025 a través de la lúdica se reforzó el conocimiento y el interés de los estudiantes por las ciencias exactas.
